AGRIDULCE
Al
fin van llegando los frutos para la plantilla del Cadete “B” que esta sufriendo
y trabajando para revertir la particular dinámica en la que nos hemos metido.
Esta semana tocaba ya hacernos con algo positivo, sumar puntos en nuestro
casillero y empezar a ver el premio al trabajo acumulado.
El
partido iba a ser complicado por las dimensiones del campo y la edad de los
participantes, con lo que el juego asociativo iba a brillar por su ausencia.
Tocaba estar juntos, remar, trabajar e intentar, desde la solidez, ir hacia
delante a por el partido.
Y el
partido empezó, y empezó pareciendo que sería uno más en nuestra mochila cuando
en el minuto 12 perdíamos 2-0, un penalti y una indecisión nos hicieron creer
que la volvíamos a liar nosotros solitos. Pero el sábado era nuestro día y los
chavales creyeron, insistieron y consiguieron igualar el partido antes del
descanso, con goles de Dani y Ferran, siendo muy superiores al rival e incluso
disponiendo de una clarísima antes del necesario tiempo de refrigeración porque
iban como motos y nos cortábamos el ritmo nosotros mismos.
Lo más difícil estaba hecho, que era empatar el
partido y no conceder ni media más al rival, pero faltaba la consecución de los
tres puntos porque lo estábamos mereciendo.
En la
reanudación seguimos a lo nuestro planteando el partido de forma brillante. Conseguimos,
primero con Diego y luego con Dani de nuevo, poner un 2-4 merecidísimo en el
marcador que hacía justicia a lo visto en el campo en 60 minutos. No sufrimos
demasiado hasta los minutos finales, los últimos diez. A partir de ahí el
partido se nos nubló. Nos vimos por delante, con el partido controlado, la
grada apretando, los rivales apretando y se nos comió un poco el ambiente. Los
últimos 5 minutos hubieran podido sobrar, ya que encajamos los dos goles
finales que tiraron por el suelo todo el trabajo realizado durante 60, pero de
todo se aprende y creo que ya no nos queda nada por aprender a nivel cognitivo,
de presión ambiental o de situación de partido, creo.
La
sensación es agridulce porque sumas pero no lo que debes, metes cuatro goles de
acción combinativa pero empatas, nos cuesta marcar goles y a nosotros nos los
marcan muy fácilmente. En definitiva, sabor agridulce el que nos deja este
partido.
Como
vengo escribiendo hace unas semanas la evolución es buena y los valores
azulejeros que resaltamos en anteriores crónicas están afianzados en el grupo.
Nadie dijo que sería fácil, un punto es un punto, pero ya merecemos tres de
golpe.
A POR
ELLOS!!!!!