Partido tempranero que nos hizo madrugar y desplazarnos hasta la Vall d’Uixó.
Afrontábamos este encuentro sabiendo que este equipo era peligroso al contragolpe y con una clara progresión ascendente en cuanto a partidos anteriores. La Moleta siempre es una campo difícil y sabíamos que teníamos que trabajar duro para poder tener posibilidades de llevarnos los tres puntos.
De principio a fin tuvimos el dominio del balón, el C. La Vall optó por esperarnos a tres cuartos de campo e iniciar la presión en cuanto optáramos por el juego interior. Tuvimos que tener paciencia para hilar jugadas y el equipo logró llegar a portería contraria jugando la pelota rápido y con precisión. Ya en el minuto 6 de la primera parte Sergio lograba adelantarnos en el marcador y poco después lograría él mismo el siguiente. Nos poníamos dos goles arriba en 20 minutos de partido y seguíamos intentándolo entrando con juego exterior ya que optaban por cerrarnos la zona central del campo.
El equipo se confío y el rival comenzó a incorporar mas gente al ataque, comenzaban a llegar con mas peligro y hasta el momento no lo habían conseguido.
El delantero ya avisó en una indecisión nuestra junto con una mala presión sobre el poseedor del balón, y peinó un centro que fue dirigido al larguero.
Primer aviso y el equipo no reaccionó, faltaron ayudas por parte de los de arriba, faltó concentración y el balón empezaba a durarnos menos. Los de atrás tenían que multiplicarse y concedíamos demasiados espacios al rival, cosa que no estamos acostumbrados a dar sea quien sea el contrario.
Poco antes del descanso el C.La Vall redujo distancias y anotó para meterle emoción al partido, un partido que estaba totalmente controlado.
En el vestuario llegamos a la conclusión que nos habíamos confiado, que el rival ya nos ganó en la primera vuelta un partido que teníamos al alcance, y no podíamos volver a caer en el mismo error.
Esto es fútbol, y en el fútbol sabemos que todo puede pasar, estábamos convencidos de que teníamos que volver a ponernos el ‘’mono de trabajo’’ y terminar de sentenciar el partido, pero en la reanudación, un penalti cometido por Jordi, el rival conseguía introducirlo al fondo de la red y dejar a 1 la diferencia.
No había que ponerse nerviosos y debíamos tener el balón, dosificar las posesiones, mover al equipo rival hasta encontrar espacios.
En una falta lejana, Rober ampliaba distancia con un gran tiro que nada pudo hacer el portero rival.
Pasamos a tener dominio completo, las ocasiones se sucedían y llegábamos con mucho peligro arriba.
En otra gran jugada, Nacho batía por bajo para poner el definitivo 2 – 5 y cerrar así, un partido donde habíamos mostrado dos caras. Una de ellas estamos acostumbrados a darla, pero la otra, debemos aprender para que no vuelva a ocurrir, ya que nos confiamos en demasía y pudo costarnos caro.
¡Así es el fútbol!
Seguimos en la parte noble de la clasificación y recortamos 2 puntos con el primero de la tabla.
Ahora aprovecharemos estas dos semanas de descanso para recargar pilas y afrontar parte final de la temporada con la máxima energía e ilusión posible.
