Bajo la lluvia, siendo las 08:57h del sábado 17 de noviembre, en el Municipal L´Olímpic de Onda, comenzó el encuentro correspondiente a la 8ª jornada de liga de la Primera A Regional Infantil de CS. Fue dirigido por el colegiado Gomis Segarra, bien. Si algún error tuvo fue de apreciación.
Por el CD Onda salieron de inicio: 1Jordi Ramos en portería; en defensa: 8Sergio Díaz y 3Roberto Viciedo en los laterales derecho e izquierdo respectivamente, centrales: 15Pau Canelles y 2Marcos; 4Oscar Valero en el medio centro; 16Marc Diago y 6Raúl Peña en el centro del campo; 21Juan Marín extremo izquierdo y 12Manuel Estevan por la derecha, y en el centro del ataque Florín Valentín.
Quedaron en la reserva: 17Raúl Escudero, 9Rubén Castillo, 11Antonio Gil y 18M.A López.
El saque inicial de centro correspondió por sorteo al visitante, pero fruto de la presión del Onda no pudieron sino recular, sin durarles nada esa primera posesión ni las posteriores, de manera que los 7 primeros minutos de juego se realizan en campo visitante, y no es hasta el 8´ que el Villarreal se acerca al área local para inquietar tímidamente a Jordi.
Juan y Marc se asociaron perfectamente y fue por la izquierda que el Onda creó numerosos problemas a los amarillos, concretados en tres claras ocasiones de gol a las que se sumó también desde la derecha Manuel, y en menor medida Florín por el centro.
El Villarreal, que no acertaba a ver por donde se le iba el agua de la cesta, no se hizo con el control del balón en su centro del campo hasta el minuto 18´ y le duró poco, bastó un intercambio de banda de los laterales para que volviera el dominio local. Al Villarreal le quedaban tímidos intentos de contraataque y poco más. Pero el fútbol es fútbol, y en uno de aquellos, en el minuto 27´, sin llegar a penetrar en el área del Onda, el 14 amarillo empalmó un zapatazo que resultó imparable 0-1 al buscar y encontrar de lleno la escuadra de la portería de Jordi.
La segunda parte más de lo mismo, con la diferencia que al Villarreal, más que impotente, ahora se le apreciaba especulador y resultadista. Nos imaginamos la gran presión a que se somete a los entrenadores de estos equipos en un club grande como el Villarreal. Lo cierto es que vimos a un grande deshacerse a la tremenda del balón sin complejos.
En el 21´ de la reanudación 17Raúl Escudero sustituye a Manuel, ocupa la izquierda del ataque, pasando Juan al centro y Florin a la derecha.
El Villarreal lo intentó de nuevo al contraataque, con parecida fortuna a la primera mitad, y desde lejos por si volvía a sonar la flauta. Casi suena en un disparo todavía más lejano que el que acabó en gol la primera parte: bastante hizo Jordi con tocarlo in-extremis y aún así se estrelló en el larguero cayendo aplomado fuera de la ralla de gol.
El Onda contó en esta segunda mitad con dos ocasiones claras de gol y otras tantas menos claras, todas a balón jugado, pero nuestra falta de gol es conocida y evidente. En el 33´ 9Ruben Castillo sustituyó a Juan Marín y por primera vez en la temporada el Infantil “A”, como medida desesperada, jugó con defensa de tres, (Rober, Pau y Marcos) pasando Sergio a la derecha y Florin a la punta de ataque. Marc, Oscar y Peña conformaron una segunda línea de ataque, y Rubén hizo de hecho de medio centro. Pese a los 4 minutos de descuento que aplicó el colegiado no se pudieron concretar las ocasiones creadas con esta nueva disposición táctica. En una de las muchas melés, la última, los jugadores locales reclamaron manos dentro del área del 24 amarillo, el colegiado no las apreció.
El Villarreal CF fue justo vencedor, aunque claramente inferior en juego. Equipo con modos y maneras de club grande, donde prima, ante todo, el resultado y para ello se recurre al pata-pum-parriba si es necesario; y en este encuentro lo hicieron: el Onda, sobre todo la segunda parte en que el Villarreal especulaba con un resultado a favor, les dio un auténtico baño de fútbol, dominio y posesión, pero sin la resolución goleadora que es la que determina quien vence en este deporte. Por tanto, el Villarreal marcó un golazo inapelable 0-1 sin acercarse al área, y fue justo vencedor.
Nota: el agua de la cesta se le escapó al Villarreal durante todo el encuentro, por el gran partido que hizo Oscar Valero en el medio centro y por toda la medular, sin que llegaran a verlo, o mejor aún: sin que supieran evitarlo.
