Equipo Inicial: 1. Hugo (P), 2. Rubén, 6. Musta, 4. Alejandro, 7. Iván, 5. Álvaro, 12. Víctor y 9. Carlos.
Suplentes: 13. Segura (P), 3. David, 10. Sergi y 11. Antonio.
Goles: 1 Carlos
Esta semana volvíamos a la competición liguera después de descansar la jornada anterior. Tras el duro golpe de perder el liderato y ante un rival duro y complicado como el Burriana, esperábamos poder rehacernos y seguir con opciones reales de estar en la zona alta. En esta ocasione no podíamos contar con Alex por lesión.
La primera parte empezó disputada, con los dos equipos queriendo dominar el balón y crear peligro en la portería rival. En el min. 9 los locales se adelantaban tras una jugada embarullada dentro del área que acababa en el fondo de la portería ondense. Este tanto trastoco bastante a nuestros alevines, que no estaban cómodos en el campo y les costaba llegar con claridad a zona de peligro. A pesar de tener alguna ocasión clara por parte de los dos conjuntos, llegaríamos con este resultado al descanso.
La segunda parte parecía que los jugadores creían en la remontada y salieron a llevarlo a cabo, pero tan solo un espejismo ya que en el 24’ volvían a recibir un nuevo gol. A pesar de ello no dejaron de buscar la forma de recortar distancia y esta llego en el min. 39 con un gol de Carlos. Todavía quedaba tiempo por delante para igualar incluso llevarse los tres puntos. Ocasiones no faltaban, aunque los locales creaban peligro a la contra con balones largos. En el min. 52 y tras escaparse el balón de las manos al portero conseguían el tercero y hacia casi imposible sacar algo positivo. Así fue y con el resultado de 3-1 finalizaría el partido.
Tres puntos perdidos que después de los resultados que se han dado en los otros encuentros nos alejan prácticamente de la primera plaza y solamente un milagro haría que consiguiéramos alguna de las dos primeras plazas.
Simplemente decir que si se quiere tener opciones de conseguir el objetivo que a todos nos gustaría y que nos marcamos a principio de temporada, no se puede permitir ciertos errores y menos regalarles los goles a los equipos contrarios. El equipo ha perdido fuelle en este tramo de la temporada y no basta con que den la cara unos cuantos, porque los partidos no se ganan con uno o dos jugadores, sino con el compromiso de todos y cada uno de ellos incluso de los que están esperando en el banquillo esperando su turno. Así que no echemos a perder una buena temporada y acabemos como se merece la temporada demostrando estos cuatro últimos partidos que somos capaces de ganar haciendo las cosas bien.